"No soy un borracho, pero tampoco soy un santo. Un hechicero no debería ser un "santo"... Debería poder descender tan bajo como un piojo y elevarse tan alto como un águila...Debes ser Dios y diablo a la vez. Ser un buen hechicero significa estar en medio de la tormenta y no guarecerse. Quiere decir experimentar la vida en todas sus fases. Quiere decir hacerse el loco de vez en cuando. Eso también es sagrado."
Corzo Cojo, brujo siux de la tribu Lakota
Un consultor Q ( consultor quantico ), debe sumergirse en el alma de la empresa... desde las torres hasta las alcantarillas... escuchar sus latidos y conocer los remedios. No se puede implementar una solución a una empresa sin conocer su alma, no será efectiva y se convertirá no en una inversión de mejora sino en un gasto estéril. Por ello, y para una óptima realización de nuestro trabajo tenemos que conocer el alma de la empresa, ¿ cuántos sistemas de mejora, de aseguramiento de la calidad, etc. fracasaron por no ser bien digeridos?
3 comentarios:
Me encanta el tocado
Yo también soy hechicera sioux porque he descendido a los infiernos y he sobrevolado las nubes...
Hola, ¿Y como levantar el vuelo, cuando estas hundido en la miseria? ¿Como ver mas allá?, cuando todos lo ven tan negro.
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