CREACIÓN, ESTRATEGIA Y
MANAGEMENT DE EMPRESAS Y ORGANIZACIONES DESDE PERSPECTIVAS DIFERENTES E INNOVADORAS

jueves, 29 de enero de 2009

Trickster, el loco sagrado

El Trickster es un dios, diosa, espíritu, hombre, mujer, o bestia antropomórfica que hace trucos o de una u otra manera desobedece reglas y normas de comportamiento.
El trickster está presente en muchas tradiciones culturales, desde América hasta Europa, el dios vikingo Loki es un ejemplo, ena película
La máscara protagonizada por Jim Carrey, la máscara que le confiere los poderes es una máscara de Loki .Responde a un arquetipo humano del que ya habla Gustav Jung, es el ser que se burla, que disuelve, que reta, y sobre todo que ríe : un consultor quántico.

Muchas tradiciones nativas ven al trickster como un mensajero de contacto
sagrado. La gente no podía rezar hasta que se riera gracias a él, porque la risa abre y libera la rígida concepción. Los seres humanos han celebrado a los tricksters en muchas culturas por temor de que estos se enojen. En la mayoría de las tradiciones americanas los tricksters son esenciales para la creación y la vida.

Hay que superar reglas obsoletas, y hacer de la innovación un acto de valentía y arrojo. Eso sólo puede hacerlo un trickster.
El Trickster en el imaginario occidental está representado por Hermes – Mercurio, ese dios de frontera, de intercambio y transgresión, dios-patrón de comerciantes, viajeros, pero también de ladrones y embaucadores.
El consultor debe ser trickster y situarse en la frontera…

Pero no nos confundamos, no es una “locura gratuita”. El Tarot, otra de nuestras referencias arquetípicas representa al Trickster en la carta del “loco”. En esta carta hay que tener en cuenta que . el Loco no es el “loco”, sino un discípulo en camino, llamado loco por las personas que no tienen valor de emprender la búsqueda alquímica del conocimiento.

El loco es el más cuerdo… de hecho el perrito o animalito representado detrás de él tiene mucho que ver… representa el ego, el niño interior. Y siempre va detrás del personaje. Como apunta Alejandro Jodorowsky El niño es el ego y no debemos permitir que éste nos guíe. El que va delante del “niño interior”, es quien no debe querer para sí nada que no quiera para los otros. En el Tarot, la carta de El Loco representa al ser esencial. El Loco tiene un perrito, el ego, que lo sigue de cerca y detrás. Esto es bueno, si fuera al revés sería terrible: lo esencial debe dirigir al ego, uno debe dejar un poco de ser yo, pero no debe darle patadas ni echar fuera al perrito. Debe ayudarle. Personalmente he sufrido y sentido verdadera compasión y cariño por “niños interiores” que han ido delante del personaje. Espero que un día el ser esencial adelante al perrito.

Curiosa mezcla, locura y cordura… risa y seriedad… innovación y sentido común. Características de un consultor quántico, de un manager de empresa o de un manager de su vida…

Hay otros personajes con un “ego” detrás… y matando dragones ( por cierto, en la imagen vikinga el trickster tiene a sus pies un dragón y un perro), pero eso… es otra historia…

sábado, 10 de enero de 2009

Asamblea en la Carpinteria


Cuentan que en una carpintería hubo una vez una extraña asamblea: una reunión de herramientas para arreglar sus diferencias. El martillo ejerció la presidencia, pero la asamblea le dijo que tenía que renunciar. ¿La causa? ¡Hacía demasiado ruido! Y, además, se pasaba el tiempo golpeando.El martillo aceptó su culpa, pero pidió que también fuera expulsado el tornillo; dijo que había que darle muchas vueltas para que sirviera de algo. El tornillo aceptó también, pero a su vez pidió la expulsión de la lija. Hizo ver que era muy áspera en su trato y siempre tenía fricciones con los demás. La lija estuvo de acuerdo, pero pidió la expulsión del metro que siempre se la pasaba midiendo a los demás según su medida, como si fuera el único ser perfecto.
En eso entró el carpintero, se puso el delantal e inició su trabajo. Utilizó el martillo, la lija, el metro y el tornillo. Finalmente, la tosca madera inicial se convirtió en un lindo mueble.
Cuando la carpintería quedó nuevamente sola, la asamblea continuó. Entonces tomó la palabra el serrucho, y dijo:
"Señores, ha quedado demostrado que tenemos defectos, pero el carpintero trabaja con nuestras cualidades. Eso es lo que nos hace valiosos. Así que no pensemos ya en nuestros puntos malos y concentrémonos en la utilidad de nuestros puntos buenos".


La asamblea encontró entonces que el martillo era fuerte, el tornillo unía y daba fuerza, la lija era especial para afinar y limar asperezas y observaron que el metro era preciso y exacto.Se sintieron entonces un equipo capaz de producir muebles de calidad. Se sintieron orgullosos de sus fortalezas y de trabajar juntos.Ocurre lo mismo con los seres humanos es fácil comprobarlo. Cuando en una empresa, o asociación o equipo… el personal busca a menudo defectos en los demás, la situación se vuelve tensa y negativa. Lo he comprobado, y sufrido, a menudo en algún grupo de empresarios.
En cambio, al tratar con sinceridad de percibir los puntos fuertes de los demás, es cuando
florecen los mejores logros humanos.
Es fácil encontrar defectos
, cualquier tonto puede hacerlo ( de hecho suelen ser los más tontos los que más critican, difaman y atacan amparándose en cosas como su edad, su cargo, su experiencia, o su nombre…), pero encontrar cualidades, eso es para los espíritus superiores que son capaces de inspirar todos los éxitos humanos. También esos “tontos” pueden ser útiles (ya hablaremos en otra ocasión del “tonto útil”), por ello hay que ser conscientes de que hasta esos personajes deben integrarse.

viernes, 9 de enero de 2009

El Clavo de Mulá Nasrudin


Mulá Nasrudin, también conocido como Nasr-ed-Din ( "victoria de la fe") y Hodja, ("el maestro" o "el profesor") es un personaje mítico de origen sufí y conocido en lugares como Egipto, los Balcanes, Oriente Medio, Asia central, Pakistán y la India, También en Turquía y Rusia. Su fama se extiende desde Mongolia hasta Turquía, e incluso en Sicilia (donde es conocido por el nombre de Giufà) , sus aventuras y anécdotas se cuentan en multitud de lenguas distintas. Son curiosas divertidas e iluminadoras sus historias. Alejandro Jodorowski recoge interesantes fábulas en su "Sabiduría de los Cuentos". Una de las más reveladoras y aplicables a nuestra vida, intima y profesional, así como al devenir de las empresas es su fábula sobre el clavo.

Mulla Nasrudin, tras haber tenido una mala racha, se ve con la obligación de vender la casa que heredó de su padre. Aprovechándose de la situación, un hombre egoísta y abusón le propone un precio ridículo. Nasrudin se da perfecta cuenta del abuso pero le propone una pequeña condición…
¡Como puede usted ver, en esta pared hay un clavo!… Este clavo lo puso mi papá, y es el único recuerdo que me queda de él. Le vendo la casa, pero deseo seguir siendo propietario del clavo. ¡Si está conforme con esta condición, acepto su oferta!… ¡Tendré evidentemente, derecho a colgar de él todo lo que me plazca!
El comprador le pregunta a Mulla:
¿Vendrá usted a menudo?
No, no, a menudo no…
No viendo ningún problema el comprador, riéndose de la petición absurda, aceptó la condición, firman el contrato de venta ante notario en el que se específica que Nasrudin es el propietario del clavo y que puede hacer lo quiera con él.
Un día de primavera Nasrudin acude a su antigua casa ..
¿Puedo ver mi clavo?
¡Claro que si! ¡Pase! - responde cordialmente el propietario.
Mulla entra y reza delante del clavo y luego vuelve a irse.
En verano, regresa con un pequeño cuadro con la imagen de su padre.
¿Puedo ver mi clavo?
El propietario le deja entrar y Nasrudin cuelga el cuadro (la cláusula se lo permite)
En otoño, llega con un manto y una túnica.
Son ropas que pertenecieron a mi padre. ¡Quisiera colgarlas en mi clavo!
El propietario ligeramente irritado debe permitírselo
Pero, un día de invierno, Mulla llega arrastrando el cadáver de una vaca. El comprador, estupefacto, le pregunta:
Pero ¿qué viene hacer aquí con esa vaca muerta y podrida?
¡Está claro, vengo a colgarlo en mi clavo!…
El propietario se enoja y llama a la policía que, llegada al lugar del litigio, le da la razón a Nasrudin a la vista del contrato. El cadáver empieza a pudrirse para desesperación del propietario. Al cabo de un cierto tiempo, Nasrudin vuelve con otro cadáver que cuelga del mismo clavo. La pestilencia es tal que el propietario se ve obligado a huir del lugar. Y Nasrudin recuperó su casa.

Hay concesiones que son clavos en nuestra casa, alma, empresa o vida. Debemos velar con atención constante para que nadie venga a nuestro universo a poner clavos que no nos corresponden. Cada experiencia, cada cosa que aceptamos puede equivaler a dejar entrar el cadáver de la vaca en nuestra propia casa. Empresas han pagado con la desaparición clavos múltiples (concesiones gratuitas a trabajadores, comportamientos díscolos de directivos, soportar clientes o proveedores abusivos…). Más vale no dejar que nos pongan el clavo a gozar de una efímera vida.
En lo personal hay especimenes que aprovechan la buena fe, la gratitud, la coherencia, la bonhomía, y la generosidad para poner un clavo en tu alma. Arráncate el clavo, aunque duela… y solo recibe a ese huésped si regresa con una flor en vez de un clavo.